El río desemboca en el lago de Ilopango, contribuye a la contaminación y destrucción de sus ecosistemas. El río Chaguite, situado en el municipio de Santiago Texacuango, es uno de los caudales que desembocan en el lago de Ilopango y durante años ha sido contaminado con químicos y colorantes, según denuncia de la Asociación Amigos del Lago de Ilopango.
Este 15 de julio la Asociación recibió fotografías y videos de pobladores de la zona donde se podía ver el agua del río de un color rojo, hecho que lleva años ocurriendo sin que el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) lleve a cabo una investigación para determinar quiénes son los causantes de la contaminación química.
“Durante los últimos años como Asociación Amigos del Lago de Ilopango hemos hecho diversas denuncias al Ministerio de Medio Ambiente sobre las descargas de colorante en el río Chaguite de Ilopango, el cual desemboca en el lago de Ilopango y a la fecha no hemos recibido ninguna respuesta”, publicó en su perfil de Facebook la Asociación.
Exigieron al Marn “investigar y sancionar a los responsables de contaminar el río Chaguite” ya que además de la contaminación, la salud de pobladores de caseríos aledaños como Changallo, El Morro, Joya Grande, Asino, Shaltipa podría estar gravemente amenazada porque pescan en el río y hacen uso del agua para sus actividades cotidianas.
“El tema de la descarga de colorantes en el río Chaguite que desemboca en el Lago de Ilopango es de suma preocupación porque no sabemos que sustancias nocivas posee y pueden poner en riesgo el ecosistema acuático y la transmisión de enfermedades por medio de la cadena alimenticia”, explicó la Asociación a Extinción.
Extinción El Salvador transmitió la denuncia al Marn a través de un chat que ha sido habilitado para ello, la respuesta obtenida fue: “Muchas gracias por informar. Se enviará al área correspondiente”.
Se desconoce si el Marn ha iniciado algún proceso de investigación por denuncias anteriores.
“Todos los colorantes, sobre todo el rojo llevan materiales pesados, se debería de rastrear el origen del plomo y si es de una fábrica de textiles como podría ser el caso, deberían de ver cuáles son los colorantes que ocupa la fábrica y las composiciones químicas”, explicó Rubén Sorto, biólogo salvadoreño.
Aseguró que en la zona deberían de haberse hecho rastreo de los químicos en las aguas, peces y cultivos donde llega el agua para así determinar qué material pesado está involucrado en la contaminación y cuáles podrían ser los daños causados a la biodiversidad y población.
“Ese es un tema de materiales pesados y aguas residuales bien serio que el ministerio de Medio Ambiente y de Salud deberían de investigar en conjunto porque es un problema que atenta con la salud de todos y no es solo que se vea feo”, explicó.
Diversos estudios de organizaciones ambientales e incluso del Marn han dejado en evidencia que el lago de Ilopango está contaminado por sólidos disueltos que llegan a través de los ríos que desembocan en el manto acuífero, aguas residuales, desechos sólidos y sedimentos arrastrados por lluvia.
Además, de la contaminación de elementos químicos por ser una caldera volcánica.
También, estudios hechos en 2014, 2016 y 2019 han mostrado que el nivel de materiales pesados en el lago es alta, por tanto no es apta para consumo humano y no se puede potabilizar.
Entre los metales pesados que contiene el agua se encuentran el Boro, Arsénico, Cadmio, Cianuro, que si se consumen en cantidades que no son permisible a mediano y largo plazo producen enfermedades crónicas.
Original: Extincionesa